Son numerosas las aplicaciones de la inteligencia artificial a la gastronomía, esta herramienta puede ayudar a desarrollar y personalizar recetas de cocina, optimizar menús, controlar el inventario y gestionar los suministros alimentarios, minimizar el desperdicio, analizar opiniones y comentarios online a gran escala, etc.
Hace unos días os hablábamos de la inteligencia artificial (IA) y de su capacidad para mejorar la seguridad alimentaria de forma muy rápida y eficaz. Hoy queremos extender la información para que tengáis una idea de las aplicaciones de la inteligencia artificial a la gastronomía y los enormes beneficios que con ello se pueden obtener, por ejemplo, mejorar la eficiencia, la creatividad y la experiencia culinaria.
En la industria agroalimentaria la inteligencia artificial se utiliza para realizar una personalización de recetas de cocina, es decir, los sitios web y aplicaciones de recetas pueden utilizar esta tecnología para recomendar creaciones culinarias personalizadas en función de diferentes cuestiones como preferencias dietéticas, disponibilidad de ingredientes, preferencias de sabor o textura, evitar alérgenos alimentarios, etc.
Por supuesto y hablando de recetas, la IA puede ser de gran ayuda para los chefs y las empresas alimentarias, ya que resulta una herramienta efectiva para la creación de nuevas recetas. En este caso los algoritmos de la inteligencia artificial son capaces de analizar múltiples combinaciones de ingredientes, diferentes técnicas de cocción, perfiles de sabor, etc., a fin de proponer combinaciones innovadoras y sorprendentes. Pero también puede intervenir en el diseño de los platos para lograr presentaciones más atractivas y visualmente impactantes, ya que tiene en cuenta factores como la disposición de los ingredientes, los colores o las texturas.
En los restaurantes, la IA puede ayudar a analizar un amplio abanico de datos, el coste de los ingredientes, los datos de ventas y las preferencias de los clientes, y con todo ello, optimizar los menús maximizando la rentabilidad. También puede gestionar los suministros y el inventario de ingredientes y bebidas, prediciendo lo que se puede necesitar e indicando cuando se deben realizar los pedidos, ello ayudará además a minimizar el desperdicio alimentario, a reducir costes y a maximizar ganancias.
Fuente: Gastronomía al día